La escuela más urgente del mundo

Como estamos especializados en niños/as, jóvenes y educación, desde el inicio de la misión humanitaria de Provocando la Paz en el campo de refugiados de Idomeni realizamos actividades con colectivos infantiles y juveniles. En primer lugar les entregamos 247 dibujos y mensajes de apoyo, paz y acogida de parte de los niños y jóvenes de Amposta y Les Cases d'Alcanar. Después organizamos algunas actividades con niños en diversas zonas del campo, como talleres de pintura, música, danza, juegos... También hicimos algunas asambleas con jóvenes y adolescentes. Estas actividades nos ayudaron a descubrir su realidad, ver sus necesidades y plantear proyectos. Ya llevaban casi un mes en Idomeni con la frontera cerrada y la situación se podía prolongar por un tiempo indeterminado. Nos encontramos con que la mayoría de menores de 8 años nunca habían ido a la escuela, porque los últimos años estaban huyendo de la guerra. Los demás nos decían que hacía más de 4 años que no iban al colegio y que tenían muchas ganas de empezar. Por eso nos planteamos impulsar con urgencia un proyecto educativo. Contactamos con maestros/as y profesores refugiados e hicimos una asamblea para explicar el proyecto educativo. Lo acogieron con entusiasmo y se pusieron a trabajar haciendo una lista del material necesario y el horario base. También lo fuimos explicando a padres y madres.

Durante este proceso unimos esfuerzos con voluntarias y voluntarios de diversas partes del mundo interesados en el mismo objetivo. La tienda cultural-educativa fue plantada en el terreno alquilado por Médicos Sin Fronteras, que hicieron un trabajo de drenaje para evitar inundaciones.

Idomeni Cultural Centre por las mañanas funciona como escuela de niños y por las tardes se dan clases para adultos, tal como pidieron ellos mismos, de inglés y alemán.

Por nuestra experiencia en algunas escuelas de África, planteamos la posibilidad de integrar la comida y la bebida en la escuela para asegurar una nutrición básica. Por la mañana, "Banana Team" facilita un plátano. A mediodía, vamos a buscar una olla de comida caliente preparada por los voluntarios internacionales de "Hot Food Idomeni" y por la tarde, los bomberos de la ONG "Acció Solidària i Logística" traen una pieza de fruta.

Cada día se va mejorando algo gracias a la buena colaboración de muchas personas, por ejemplo habilitando un espacio exterior con sombra previendo el calor del verano.

Nos hubiera gustado que esta experiencia educativa, la primera para muchos de ellos, fuera en una escuela edificada y segura de Europa, pero de momento no ha sido así y no sabemos si será posible.

Mientras estén allí, nos preocuparemos que tengan un oasis de paz y cultura en medio de todo lo que viven, una educación digna, y que los maestros puedan ejercer dignamente su profesión.

Gracias a todas las personas que día a día hacen posible este proyecto y de esta manera, que la vida de los refugiados sea más humana y digna.

Para colaborar: Fundación Provocando la Paz

2100 3512 652200098686

Nueva edición de la campaña de educación en valores

Teniendo en cuenta que nuestra principal preocupación son los niños/as, jóvenes y la educación, hemos organizado una nueva edición de la campaña de educación en valores dirigida a escuelas, institutos, universidades y asociaciones centrada en el tema de los refugiados, partiendo de nuestro compromiso humanitario.

Empezamos jueves 21 de abril de 2016 en la escuela Provençals del Poblenou (Barcelona). Continuaremos en institutos de Salamanca y en otros centros educativos.

Contacto: provocandopaz@gmail.com

Ataques a los refugiados en Idomeni

La tensión y la desinformación son una constante vital en el campamento de Idomeni (Grecia) desde que, el 24 de febrero de 2016, Austria instara a los cuatro países de la ruta de los Balcanes (Macedonia, Serbia, Croacia y Eslovenia) a impedir el paso a más refugiados. El cierre total de la frontera de Macedonia se hizo efectivo a primeros de marzo. Ansiosos por continuar su viaje, los refugiados concentrados en Idomeni temen ser evacuados a otros campos militarizados. 

El equipo de Provocando la Paz que nos encontramos en el campo de refugiados de Idomeni en misión humanitaria queremos compartir nuestra experiencia: el domingo 10 de abril de 2016 hubo una manifestación pacífica en el campo de refugiados de Idomeni (Grecia). Más tarde organizaron una marcha pacífica hacia la frontera con la Antigua República Yugoslava de Macedonia para denunciar su situación y pedir que se abran las fronteras. La policía macedonia fue tomando posiciones a lo largo de la frontera, con un tanque y los antidisturbios.
Sobre las once de la mañana la policía macedonia empezó a disparar con balas de goma y a bombardear con gases lacrimógenos y bombas aturdidoras el campo de refugiados, afectando a la práctica totalidad de la población del campo, refugiados y cooperantes. Incluso se produjo una incursión en suelo griego de las fuerzas de seguridad de Macedonia para gasear a los refugiados. Durante todo el día continuaron los bombardeos y entre las 18h. y las 19h. tiraron dos bombas en el centro del campo, en el terreno de Médicos Sin Fronteras, muy cerca de donde tenemos la tienda de la escuela. La gente vino a refugiarse a la tienda de la escuela y tuvimos que improvisar un hospital: en una parte, los heridos más graves, atendidos por médicos de Shangai; en la otra parte, los demás casos, sobretodo bebés, mujeres y niños. Vivimos momentos aterradores y desoladores. Atendimos a unos 100 heridos con crisis respiratorias y lesiones de diversa consideración en los ojos y la cara, la mayoría niños y mujeres que estaban preparando la cena tranquilamente en su tienda. En el hospital de Médicos Sin Fronteras fueron atendidas unas 300 personas, 200 por intoxicaciones debidas a los gases, 30 por impactos de pelotas de goma y otras 20 por otro tipo de heridas. Entre los heridos por pelotas de goma, hubo 3 niños, que recibieron serios impactos en la cabeza. Además, 7 heridos fueron trasladados al hospital de Kilkis.
Los jóvenes sirios entre bomba i bomba nos repetían con un tono desgarrador:¿dónde está la protección europea? Porque día a día se violan los derechos humanos y los derechos de los refugiados en Idomeni. Visto desde dentro cada día se parece más a un campo de exterminio. 

Los bombardeos se prolongaron hasta el miércoles 13 de abril, cada vez que un grupo de refugiados se acercaba a la frontera para protestar por su dramática situación. Una semana después del bombardeo masivo, permanecían los efectos de los gases sobre la población del campo, casi toda afectada por conjuntivitis y problemas respiratorios de diversa consideración.

Como consecuencia de los macabros ataques del domingo, unos 700 refugiados abandonaron Idomeni al día siguiente a bordo de nueve autobuses, con destino a otros campos de refugiados en Grecia, ya que no se sentían seguros allí después de los últimos incidentes.

Desde Provocando la Paz queremos transmitir nuestra denuncia hacia los dirigentes europeos. Se trata de una gran crisis humanitaria de refugiados que está siendo gestionada de manera cruel, lenta e ineficaz, por los dirigentes políticos europeos, lastrados por sus cálculos económicos, políticos, geoestratégicos, electoralistas y sus miserables intereses.

Un refugiado tiene derecho de asilo político en condiciones de seguridad.
Aquí en Idomeni para realizar el procedimiento legal, los refugiados sólo disponen de tres días a la semana, durante una hora vía Skype. Por otra parte, Turquía recibirá de la Unión Europea 6.000.000 millones de euros como contrapartida por deportar a territorio turco a todos los que lleguen a Grecia de forma irregular. ¿No podría gran parte de esta enorme cantidad, ser destinada a ampliar el número de funcionarios para regularizar de manera ágil a los refugiados y ser repartidos en otros países europeos, tal como acordaron? ¿O es que realmente quieren exterminarlos y no se atreven a decirlo?

Amanecer de muchos soles en Idomeni

Cada amanecer es único en Idomeni, donde se lucha cada día por sobrevivir y se respira humanidad. Por la mañana todavía humean las hogueras encendidas durante la noche para cocinar y reunirse la familia recordando sus canciones y tradiciones. 

Pero cuando sale el sol físico y empieza a dar calor, van apareciendo otros soles que dan otro tipo de calor. Unos cogen el camión y van al mercado a comprar fruta y verduras para intentar alimentar a 12.000 personas, otros pelan patatas y trocean zanahorias y cebollas, otros cocinan con eso algo caliente, otros lo reparten.

En una tienda en medio del campamento unos voluntarios calientan agua y preparan la bañerita para que las madres puedan bañar a sus hijos dignamente.

Los médicos se disponen a atender las necesidades sanitarias de las personas que allí sobreviven.

Algunos se preocupan por la educación de los niños, adolescentes y jóvenes, ya que los más pequeños todavía no han podido ir nunca a una escuela y los demás hace 4, 5 o 6 años que no reciben atención escolar porque están huyendo de la guerra y el terrorismo.

Llega un contenedor de ropa. Se hace una llamada a los voluntarios y voluntarias para que acudan a clasificar, mientras otros están repartiendo ropa interior.

Atacados, humillados, ninguneados por la frialdad, el cinismo y los intereses económico-electoralistas-geoestratégicos de los dirigentes europeos, los refugiados reciben la luz y el calor de esos soles que van apareciendo cada día sin falta, unos soles que han aparcado sus vidas y proyectos personales para estar allí, ayudar, compartir, escuchar, atender... y que son portadores de la luz y el calor de muchas personas que les apoyan, de los que todavía tienen sentimientos y corazón. Gracias por la luz y el calor... de lo mejor de nuestra humanidad. 

Es el mejor amanecer que he visto nunca.